Los movimientos sociales son agentes clave del cambio social y político, especialmente en las transformaciones hacia la justicia de género.
¿Qué es el cambio social?
El cambio social es un proceso, en el sentido de que involucra una serie de eventos durante un período determinado. En él está implícita la idea de continuidad y muestra una secuencia de operadores que modifican su naturaleza y dirección.
Dado que la sociedad es principalmente un sistema de relaciones, los cambios sociales en primera instancia aparecen como cambios en las relaciones sociales, los cambios sociales en primera instancia aparecen como cambios en las relaciones sociales. Los cambios estructurales pueden seguir más adelante.
Las causas de los cambios sociales pueden contabilizarse en cuatro categorías, que actúan de forma independiente. De ahí que su contribución a los cambios sociales sea una cuestión de grado. Pueden identificarse como el medio físico, las condiciones biológicas, el orden tecnológico y el orden cultural. Las siguientes definiciones pueden explorar más el significado y la naturaleza del cambio social:
- “Por cambio social se entiende solo las alteraciones que ocurren en la organización social, es decir, la estructura y las funciones de la sociedad” Davis.
- “Los cambios sociales son variaciones de los modos de vida aceptados: ya sea por alteraciones en las condiciones geográficas, en el equipamiento cultural, en la composición de la población o de las ideologías y si se produce por invención de difusión dentro del grupo”. Gillin y Gillin.
- “Cambio social es un término utilizado para describir las variaciones o la modificación de cualquier aspecto de los procesos sociales, los patrones sociales, las interacciones sociales o la organización social” Jones.
En América Latina es evidente el avance sobre el liderazgo de las mujeres y su participación en los movimientos feministas y sociales, explorando su contribución al cambio de las normas de género. Además existen diversas formas en que los movimientos sociales liderados por mujeres contribuyen a transformar las normas patriarcales.
Movimientos feministas y cambio social
Los movimientos de mujeres y feministas realizan un trabajo importante en sus contextos para iniciar transformaciones sociales hacia la igualdad y la justicia. Para lograr el cambio, los activistas ocupan principalmente el espacio público, presionan a los gobiernos, crean alianzas y apelan a los regímenes internacionales para buscar cambios legales o de políticas. Utilizan una variedad de tácticas para crear conciencia, incluidas actuaciones artísticas, prestación de servicios y realización de talleres educativos e incluso la #HuelgaFeminista. Lo más probable es que se utilicen para impugnar y renegociar los roles y las relaciones de género.
Las formas en que las mujeres forman parte del cambio social en Latam se insertan en la movilización política de las mujeres tiene un impacto importante en las normas de género, a través de dos vías principales:
- Promoviendo cambios legales y/o de políticas, que instituyen nuevos órdenes normativos y, por lo tanto, brindan incentivos o desincentivos para el cambio de actitud y comportamiento.
- Fomentando la renegociación de roles y relaciones de género dentro de la sociedad, apuntando directamente a las actitudes y comportamientos de género (ya sean de hombres o mujeres) que sustentan la injusticia de género.
Otro hallazgo clave es que la forma en que los movimientos de mujeres y feministas enmarcan sus luchas en América Latina, tiende a ser el resultado de negociaciones entre diversos grupos de mujeres dentro de un movimiento determinado. Además, los movimientos sociales tienden a tener más éxito cuando “vernacularizan” –o adaptan– sus luchas a los contextos locales.
Nuevo rol de las mujeres en Latinoamérica
Su inmensa contribución ha sido en los diversos campos como la política, la danza, la música, el emprendimiento, la literatura, la ciencia, la religión, la industria y el cine.
Las mujeres han accedido a diversas profesiones, logrado avances significativos en la vida económica y social, pero aún existen algunos obstáculos ocultos. Hay una gran brecha entre los medios y la realidad. A pesar de la ley estricta sobre el acoso a las mujeres en el lugar de trabajo, el abuso sexual y las muertes por dote son noticias comunes en la vida cotidiana. Los hombres han definido el papel de las mujeres incluso en el siglo XXI. Sin embargo, ha habido infinitas variaciones del estatus de la mujer, que difieren según el medio cultural, las estructuras familiares, la casta, la clase, los derechos de propiedad, etc.
Desde mediados del siglo XX se puede observar un creciente número de mujeres en el mercado laboral. Además, las mujeres han asumido roles dominados por hombres, por ejemplo, roles de liderazgo, incluso en la política. Desde 1965, la proporción de mujeres que se han especializado en negocios, medicina y derecho ha aumentado significativamente.