Las acciones para prevenir la violencia de género debe comenzar desde las primeras edades del desarrollo para que realmente se dé un cambio en la sociedad. Diversas investigaciones señalan que las mujeres son víctimas de violencia por parte de la pareja del sexo opuesto desde etapas tempranas de su vida, es decir, desde las relaciones de noviazgo durante la adolescencia.
Es evidente que vivimos en una cultura donde se han producido grandes transformaciones en los roles masculinos y femeninos, transformaciones que han llevado a un cambio en las relaciones de pareja, exigiendo esto que las expectativas y las actitudes de los sujetos tengan también que cambiar. Estas modificaciones y sus reacciones pueden desencadenar conflictos de pareja que dan lugar a la violencia de género.
Si quieres conocer a fondo esta temática, te recomendamos leer nuestro artículo sobre causas y consecuencias de la violencia de género.
Las consecuencias de la violencia durante el noviazgo suponen un grave problema que afecta en grado considerable no sólo a la salud física sino también a la salud mental de las adolescentes, por lo que debe estudiarse cómo prevenir la violencia de género o detectarla de manera temprana, así como reducir su frecuencia y manifestaciones más graves.
Prevenir la violencia de género es un hecho central en los esfuerzos por erradicar y eliminar las causas fundamentales de la violencia de género.
El trabajo juvenil y el activismo por los derechos humanos pueden hacer una contribución importante a ese trabajo preventivo.
¿cómo prevenir la violencia de género en la adolescencia?
Trabajar para cambiar actitudes o cuestionar los roles y estereotipos de género que hacen que la violencia de género sea aceptable en la sociedad, este es un factor fundamental para abordar el tema de cómo evitar la violencia.
Esto se puede hacer mediante el estudio y prevención de la violencia de género, la organización de campañas, la formación, la educación entre iguales o mediante la inclusión de una dimensión de igualdad de género en todos los aspectos de las políticas educativas:
Brindar información accesible sobre qué es la violencia de género
Se debe informar sobre sus diferentes formas, posibles remedios y medidas de apoyo existentes. Esto podría incluir la producción de folletos o sitios web, el trabajo en campañas en las redes sociales, la creación de anuncios de televisión o la publicación de información en centros juveniles y escuelas.
Formar profesionales en prevenir la violencia de género
Para que sean capaces de identificar, abordar y dar respuesta a la violencia de género. Esto podría incluir la capacitación de maestros, trabajadores juveniles, trabajadores sociales, capacitadores, policía, sistema judicial, proveedores de atención médica, etcétera.
Revelar la escala del problema de la violencia contra la mujer
La violencia de género rara vez se discute y los datos a nivel local o regional a menudo no están disponibles o están incompletos. Muchas víctimas optan por no denunciar los incidentes y es posible que la ley no castigue determinadas formas de violencia (p. Ej. Discurso de odio sexista). Es muy importante que quede claro el alcance del problema sobre cómo evitar la violencia.
Campañas y políticas de sensibilización para abordar la desigualdad de género y la violencia en la adolescencia
También pueden ayudar a aumentar la importancia del problema ante la opinión pública. Estas campañas pueden utilizar medios tradicionales, como carteles, folletos y sitios web, pero también pueden utilizar medios sociales y flash mobs, por ejemplo.
Programas de empoderamiento que fortalezcan la autoestima en los adolescentes
Es importante fomentar la autonomía de aquellos sectores de la población que tienen más probabilidades de estar en riesgo de violencia.
¿Cómo prevenir la violencia de género y sus factores de riesgo?
¿A qué se debe que algunos niños no aprendan a regular la agresión y desarrollen problemas de comportamiento? Más que ofrecer una explicación causal, lo que distintos investigadores sostienen es que existen un conjunto de factores interactuantes que aumentan la probabilidad de que un niño presente problemas de comportamiento agresivo, los cuales, además, tienen un efecto acumulativo. Eso es importante para conocer cómo evitar la violencia.
En cuanto a los factores individuales, la consistencia de la evidencia empírica acumulada por distintos investigadores ha permitido generar consenso en cuanto a que existen algunas características individuales que se observan muy tempranamente en los niños y que influyen en la emergencia de problemas de comportamiento agresivo.
Dentro de éstas se encuentran el género, los problemas de tipo neurocognitivo y algunos rasgos de personalidad.
Saber cómo evitar la violencia es la única forma de detenerla incluso antes de que ocurra. Requiere compromiso político, implementar leyes que promuevan la igualdad de género, invertir en organizaciones de mujeres y abordar las múltiples formas de discriminación que atentan contra los derechos de la mujer a diario.
La evidencia sobre la prevención ha evolucionado considerablemente durante la última década, incluso como resultado de varias iniciativas apoyadas por organizaciones internacionales.
Estrategias para evitar la violencia de género
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), el asunto de cómo prevenir la violencia se convirtió en un tema a tratar desde fines del siglo pasado, cuando comenzó a aplicarse la distinción entre la violencia relacionada con conflictos bélicos y aquella que ocurre entre civiles en época de paz, lo que implicó un cambio de paradigma al asumir el tema de la violencia como un problema de salud pública.
- Caracterizar los diferentes tipos de violencia, definir su magnitud y evaluar sus causas y sus repercusiones de salud pública, incorporando en el análisis una perspectiva basada en las diferencias entre los sexos.
- Evaluar los tipos y la eficacia de las medidas y programas destinados a cómo prevenir la violencia y mitigar sus efectos, prestando especial atención a las iniciativas de orientación comunitaria.
- Promover actividades para resolver este problema a nivel tanto internacional como de país.
- Asegurar la participación coordinada y activa de los programas técnicos apropiados de la OMS.
- Reforzar la colaboración de la organización con gobiernos, autoridades locales y otras organizaciones del sistema de las Naciones Unidas en la planificación, la aplicación y el seguimiento de programas sobre la prevención y la mitigación de la violencia.
Cómo prevenir la Violencia de Género en la Escuela
Saber cómo prevenir la violencia de género en entornos escolares es fundamental para fomentar un ambiente seguro y respetuoso para todos los estudiantes. Educar sobre la igualdad de género desde una edad temprana es esencial. Los planes de estudio deben incorporar programas de educación en género que promuevan la comprensión y el respeto por las diferencias, así como la empatía y el pensamiento crítico. Además, es esencial conocer cómo prevenir la violencia de género y establecer políticas de tolerancia cero hacia el acoso y el bullying de género, con procedimientos claros para reportar y abordar incidentes. La capacitación del personal escolar en la detección temprana para dominar cómo prevenir la violencia de género y en cómo intervenir de manera efectiva también es crucial para crear un ambiente en el que los estudiantes se sientan seguros para hablar sobre cualquier situación de violencia.
Cómo evitar la Violencia de Género en la Familia
Saber cómo evitar la violencia de género en el entorno familiar implica la promoción de relaciones basadas en el respeto y la igualdad. La educación es un componente clave: brindar a las personas herramientas para reconocer las señales de violencia, comprender los roles de género y promover el diálogo abierto sobre estos temas. Los programas de apoyo para padres y cuidadores pueden ofrecer orientación sobre cómo evitar la violencia y criar a sus hijos en un ambiente de respeto mutuo y eliminar los estereotipos de género. Además, es esencial implementar leyes y políticas que protejan a las víctimas y sancionen a los perpetradores de la violencia de género en el ámbito familiar. Brindar recursos de apoyo, como líneas de ayuda y refugios seguros para víctimas, es fundamental para entender cómo evitar la violencia y ayudar a quienes enfrentan situaciones de violencia a buscar ayuda y escapar de relaciones abusivas.
